Trova y algo más...

domingo, 14 de junio de 2009

El dolor es de todos...

Sra. Lozoya:
Con todo respeto, con toda humildad ante la pérdida que usted y otras muchas familias sufrieron en el siniestro del pasado 5 de junio, tengo algunas dudas que me nacen de la lectura del desplegado publicado el día de hoy, firmado al calce por Usted:
1. Usted dice: que hay quienes quieren aparecer como ofendidos por lo acontecido, repartiendo culpas al por mayor a personas inocentes; sin embargo, convendría comentarle que las ocho mil personas que marcharon el miércoles y las cinco mil que lo hicieron el sábado no quisimos parecer ni aparecer ofendidos, estamos ofendidos, y claro que repartiendo culpas al por mayor a personas inocentes… mientras se demuestra lo contrario.
2. Usted manifiesta que desde el ACCIDENTE circulan por la red correos que buscan linchar a familias enteras y sus reputaciones; sin embargo, convendría aclarar que cuando existe negligencia en un suceso trágico, éste deja de ser accidente. Y claro que por la red circulan correos que señalan (no buscan linchar) a familias enteras y su reputación, que las mismas autoridades que investigan el caso han señalado, ratificado y oficializado las circunstancias que dañan su reputación.
3. Usted subraya: A aquellas personas que están más ocupadas en CAPITALIZAR POLÍTICAMENTE con el dolor de nosotros les digo: ¡YA BASTA!; sin embargo, convendría comentarle que incluso guardar silencio ante esta situación es una postura que politiza el suceso, así que de cualquier forma el caso se politiza. Lo que debería de hacerse, en todo caso, es canalizar positivamente esa politización.
4. Usted reclama: No hagamos que crezca el número de familias afectadas con este tipo de infamias; sin embargo, los fiscales del caso han señalado la serie de arbitrariedades que ensucian el suceso, y es precisamente eso lo que afecta a las familias que usted pretende defender.
Al margen de que el costo de un desplegado como el que usted firma supone un gasto bastante fuerte, como para que personas de ingresos modestos como entendemos que son los usuarios de la Guardería ABC lo mande publicar de su bolsillo; al margen del sospechosismo que encierra esto, se debe subrayar que en esta tragedia la muerte es particular, pero el dolor es de todos… mejor dicho: de casi todos, y no puede usted reclamarnos que nos sintamos ofendidos o dolidos por el suceso.
El dolor social permea en la indignación de una ciudadanía que ha hecho suya la tragedia y ha dicho que ustedes, los padres directamente afectados, no están solos.
Sí, la muerte es particular, de cada persona que perdió a su hijo en el incendio, pero el dolor es de muchos, es de todos, y se manifiesta de muchas formas. Una de ellas es el movimiento civil que exige que se esclarezca no sólo el incendio y sus causas inmediatas, sino lo que propició el siniestro, las corruptelas, el silencio de muchos que deberían de haber aparecido desde el principio, el tráfico de influencias y demás irregularidades permitidas por funcionarios de los tres niveles de gobierno.
Una pareja que perdió a su hijo en el incendio dijo ayer que a algunos padres ya les llegaron al precio para que reventaran el movimiento ciudadano. Espero y deseo de todo corazón que usted no sea una de los que han preferido olvidar y callar. Lo digo con todo respeto a usted y al recuerdo de su bebé.