Para comprender la importancia del trabajo que realizó la maestra Manuela Garín Pinillos de Álvarez en Sonora como coordinadora de las carreras de Física y Matemáticas y primera directora de la Escuela de Altos Estudios, es necesario recordar los orígenes de esta Escuela.
En 1963, la Universidad de Sonora era joven, de veintiún años y contaba con seis carreras: Farmacia, Contador Público, Ingeniería Civil, Ingeniero Agrónomo, Licenciado en Derecho y Enfermería, que cubrían las necesidades básicas de profesionistas en el Estado.
La Universidad de Sonora, el más noble producto de la sociedad sonorense, surgida del interés por contar con una institución que permitiera formar profesionistas en esta región alejada del centro del país, desde su inicio tuvo el apoyo de la comunidad, ya que inclusive se aprobó la creación de un impuesto del 10% adicional a todos los impuestos que se pagaban en el Estado para su sostenimiento.
En un contexto nacional de estabilidad económica --todavía no usábamos la palabra crisis--, para la Universidad de Sonora se tenían grandes planes. Se crearon nuevas carreras, como Ingeniero Químico e Ingeniero Industrial, para que sus egresados ayudaran al desarrollo del Estado, y se fundó la Escuela de Altos Estudios.
La Escuela de Altos Estudios, según las palabras del Dr. Moisés Canale, entonces rector de la Universidad, nació de la intención de reforzar académicamente a la institución, pues los dos grandes centros productores de profesionistas y profesores de Letras y Ciencias, la UNAM y el Instituto Politécnico Nacional, absorbían a sus propios egresados y era muy difícil conseguir maestros en estas áreas. Los directivos de la Universidad, impulsados por las ideas del Dr. Canale, decidieron hacer una escuela aquí para formar los maestros de nivel superior que se requerían en el Estado.
Para respaldar la fundación de la Escuela de Altos Estudios, el H. Consejo Universitario acordó integrar un cuerpo consultivo de Doctores Honoris Causa con las siguientes personas: Dr. Ignacio Chávez, Rector de la UNAM; Dr. Víctor Bravo Ahuja, Subsecretario de Enseñanza Técnica y Superior; Dr. Alfonso Ortega Martínez, Secretario General de ANUIES; Dr. Ignacio Burgoa, distinguido Jurisconsulto; Dr. Silvio Zabala, Director del Colegio de México; Dr. Arturo Resenblueth, Fisiólogo mexicano, y Don Jaime Torres Bodet, Secretario de Educación Pública.
La Escuela de Altos Estudios comenzó sus labores en marzo de 1964.
La situación en el área de Ciencias de la Escuela de Altos Estudios era la siguiente: se contaba con un nebuloso plan de estudios para obtener el título de Físico-Matemático, que incluía materias como Química y Dibujo; la planta de maestros estaba formada, en su mayoría, por maestros de la Escuela de Ingeniería, entre quienes estaba el actual presidente de Hermosillo, Ing. Jorge Valencia Juillerat, el Ing. Luis Gómez del Campo, Heriberto Molina y Raúl Peterson.
En estos primeros días de la Escuela sucedían cosas así: uno de los profesores, al tratar de calcular una velocidad a partir de una ecuación de segundo grado, encontró que el subradical quedaba negativo; "Bueno dijo--, vamos a cambiarle de signo a toda la ecuación para arreglar esto". Ante esto, el Ing. Alejandro Dueñas Durán, compañero de nosotros, alzó los ojos al cielo y dijo “¡Ahhh!”.
En Álgebra seguíamos el Hall y Kinght y nos enteramos que existían unos entes que se llamaban conjuntos; en una curva que tuviera una cúspide no teníamos muy claro si en ese punto la función era continua, si tenía derivada allí, etc. Éramos una especie de apéndice de la Escuela de Ingeniería.
A fines de ese año, 1964, llegó a la Universidad, como primera directora de la Escuela de Altos Estudios y jefa de su Departamento de Matemáticas, la Maestra Manuela Garín de Álvarez y puso orden en el caos: cambió el plan de estudios a uno de cuatro años, con los primeros dos años comunes a Física y Matemáticas y los otros dos años con materias específicas de cada carrera. Podemos decir que vino a profesionalizar la enseñanza de la Matemática en la Universidad de Sonora.
La maestra consiguió también traer jóvenes egresados de la Facultad de Ciencias, como los físicos Román Álvarez y Carmen Barea de Álvarez, y el matemático Jorge Burges.
Además, la Maestra Garín, junto con el Ingeniero Arturo Delgado y otros maestros de Ingeniería ya mencionados, formaron la Sociedad Sonorense de Matemáticas, donde trataban distintos temas a través de pláticas y conferencias.
A propuesta de la Maestra Garín de Álvarez, en febrero de 1966 se realizó en la Universidad de Sonora el IX Congreso Nacional de la Sociedad Matemática Mexicana, con lo que la Maestra culminó su labor en Altos Estudios, pues puso al Departamento de Matemáticas en el mapa de la matemática mexicana, con lo que fue más fácil conseguir maestros para el Departamento.
Entre ellos recordamos a Zenaida Elvira Ramos, Arturo Nieva, Aurelio Canale, Raimundo Bautista, Jorge Toro, Olivero Sánchez, Gloria Senderos y el Dr. Oscar Valdivia, maestros que permanecían aquí un año o dos y regresaban después a la Ciudad de México.
Mención especial debemos hacer del profesor Enrique Valle Flores, quien con su permanencia de 15 años en la Jefatura del Departamento de Matemáticas vino a consolidar nuestra Escuela.
Uno de los dichos del profesor Valle Flores que recuerdo dice: "La ciencia no tiene nacionalidad, pero los científicos sí".
En la tarea de formar a los científicos que nuestro país requiere, en la tesonera labor de crear un núcleo, un germen de una Escuela de Matemáticas, en la siembra de las semillas del conocimiento en el desierto sonorense, la actividad de la Maestra Garín es invaluable.
Al igual que los misioneros y los pioneros que, sin importar distancias, abrieron los caminos de Sonora a la civilización, la Maestra Garín dejó familia, esposo e hijos, dejó colegas y amistades, y vino a construir los cimientos de una obra educativa que ya fructifica.
A la fecha (1998) han egresado de la carrera de Licenciado en Matemáticas 167 personas, de los cuales tenemos 100 titulados. De ellos, 28 tienen grado de Maestría, y 7, de Doctorado. El Departamento de Matemáticas tiene 110 alumnos en Licenciatura y 25 en Maestría de Matemáticas Educativa, con 140 maestros, de los cuales 48 son de tiempo completo y que dan servicio a 19 carreras de la Universidad.
Su influencia en la enseñanza de las Matemáticas en el Estado y en el Noroeste de México es considerable; por lo anterior, por esos logros, en mi nombre, a nombre de mis compañeros de matemáticas, en nombre de la comunidad universitaria de Sonora y a nombre del pueblo de Sonora, le decimos “¡Muchas gracias, Maestra Manuela Garín de Álvarez… muchas gracias!”
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Palabras pronunciadas por el matemático Jorge Ontiveros, primer egresado de la Licenciatura en Matemáticas, en el homenaje que se le rindió a la maestra Manuela Garín durante la ceremonia de clausura del XXXI Congreso Nacional de Matemáticas, en Hermosillo. Diciembre de 1998.
Jorge Ontiveros falleció el 13 de junio de 2005.
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Fuente:
• http://www.matmor.unam.mx/~muciray/smm/60/manuela2.html
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