Mientras se desarrollaba una de las maratones más antiguas del mundo, dos artefactos explosivos detonaron en la línea de meta de la carrera de Boston, que de inmediato dejó a tres personas fallecidas y a cerca de 138 heridos.
Investigadores federales señalaron que hasta ahora no se conocen sospechosos ni personas que se hayan atribuido la responsabilidad del ataque, que se desarrolló además en el Día de los Patriotas.
Ante esto, la Casa Blanca anunció que el caso sería tratado como un acto de terrorismo, pero aún no se determina si el ataque proviene de una fuente extranjera o nacional.
Los dos dispositivos que explotaron utilizaron pólvora y fueron rellenados con rodamientos de bolas y metralla para maximizar heridas, según aseguró un funcionario de una agencia del orden, que solicitó no ser identificado.
“Descubriremos quien hizo esto. Descubriremos por qué hicieron esto”, señaló el mandatario norteamericano, Barack Obama, y agregó que “cualquier individuo responsable, cualquier grupo responsables, sentirá todo el peso de la justicia”.
Asimismo, prometió la captura de los autores, en tanto un grupo talibán paquistaní, que había amenazado con atacar a Estados Unidos, negó hoy cualquier participación en las explosiones.
A su vez, Richard Deslauries, el agente especial del FBI a cargo de la ciudad de Boston, señaló que “se trata de una investigación criminal que es una investigación terrorista potencial".
Y siguiendo esa línea, el FBI realizó un cateo en una casa en los suburbios de Boston, en la localidad de Revere, a últimas horas del día.
Al finalizar la indagación distintas imágenes mostraron a la policía cargando bolsas negras. Se solicitó, además, cualquier video, audio o fotografía tomadas por los espectadores del maratón.
Deslauries anunció que convertirá en internacional la pesquisa sobre las explosiones ocurridas en el Maratón de Boston, y aseguró que no se recibieron amenazas previas al ataque.
"Esto va a ser una investigación a nivel mundial", dijo en conferencia de prensa. Y puntualizó: “Los agentes federales se trasladarán a donde quiera que les lleven las pistas para esclarecer la autoría de las explosiones del lunes, que dejaron tres muertos y 176 heridos”, afirmó.
"Iremos hasta el fin del mundo para encontrar a los responsables de este despreciable crimen", añadió el agente federal.
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Y nosotros ya sabemos qué quiere decir eso, de ir hasta el fin del mundo para encontrar a los responsables de este despreciable crimen, ¿no?
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