Conservar la cultura y difundirla, aumentarla por la obra de investigación y de creación, organizar y defender el alma nacional, reglamentar y crear el profesionalismo, colaborar en la educación pública, construyendo una aristocracia del espíritu y con ella aconsejar, dirigir los destinos patrios con miras de la universalidad; tal es, en resumen, la tarea de las universidades. José Vasconcelos.
Precursores y fundadores
Según la dinámica social, en el umbral de todo gran acontecimiento aparece el hombre o grupo de hombres, destinado a realizarlo; así, correspondió al gobernador alamense, licenciado Carlos Rodrigo Ortiz Retes, en el atardecer del siglo XIX, dar la clarinada del amanecer universitario al crear el Instituto Científico y Literario, que abrió sus puertas a la juventud estudiosa el 1 de julio de 1882, cuyo últimos vestigios materiales tuvimos el honor de contemplar allá por 1923, en el Colegio de Sonora.
Según la dinámica social, en el umbral de todo gran acontecimiento aparece el hombre o grupo de hombres, destinado a realizarlo; así, correspondió al gobernador alamense, licenciado Carlos Rodrigo Ortiz Retes, en el atardecer del siglo XIX, dar la clarinada del amanecer universitario al crear el Instituto Científico y Literario, que abrió sus puertas a la juventud estudiosa el 1 de julio de 1882, cuyo últimos vestigios materiales tuvimos el honor de contemplar allá por 1923, en el Colegio de Sonora.
Pasado el noble intento del gobernante antes citado, la idea de fundar en Sonora, no ya un instituto, sino una universidad, se despertó en la mente inquieta y eminentemente creativa de sonorenses distinguidos, en las postrimerías de la década de los años veintes, idea que cristalizaría en octubre de 1942.
Ante el aserto de que la creación de la Universidad de Sonora tuvo origen en la mente de intelectuales no sonorenses, surgió la voz del licenciado Francisco Duarte Porchas, profesional de reconocida probidad y competencia, profundo conocedor de todo lo relacionado con la fundación de la Universidad, para afirmar categóricamente, según datos existentes en los anales del Alma Máter que: “La idea de fundar la Universidad surgió entre un grupo de sonorenses en la Ciudad de México hacía ya bastantes años”.
El honor, pues, de precursores primero y después de reales y positivos fundadores, corresponde al grupo de estudiantes a que se refirió el licenciado Duarte Porchas, cuyos nombres aparecerán enseguida en nómina, que alguna vez la gratitud universitaria y la del pueblo de Sonora escribirá con caracteres áureos:
Guillermo Acedo Romero, Francisco Duarte Porchas, Herminio Ahumada, Gilberto Suárez, Enrique E. Michel, Fernando Treviño, Leandro Soto Galindo, Francisco J. Ramírez, José A. Montaño, Octavio Rivera Soto, Adalberto Monteverde, Carlos B. Michel, Manuel Gándara, Enrique Carrillo, Guillermo Ibarra, Fausto Acosta Romo, Francisco Acosta, Manuel Revilla, Moisés Mirazo, Raúl Terán, Luz Rivera Soto, Armando Chávez Camacho, Alejandro Kitasawa, Matilde Rivera Soto, Alberto Gaxiola, Héctor Martínez de Castro, Carlos Maldonado, Plutarco Riesgo, Fernando Escobar, Luis Encinas Johnson, Enrique Rivera, Ernesto Salazar Girón, Enrique Encinas Johnson.
Gobernantes y Legisladores
Al pensamiento vigoroso de precursores y fundadores, se unió al de gobernantes y legisladores que recogieron con entusiasmo la naciente idea para conferir a la Universidad personalidad jurídica y establecer normas avanzadas sobre su estructura ideológica, bajo los principios inalienables de autonomía y libre cátedra, que han sido, hasta hoy, postulados fundamentales de nuestra Alma Máter.
Al pensamiento vigoroso de precursores y fundadores, se unió al de gobernantes y legisladores que recogieron con entusiasmo la naciente idea para conferir a la Universidad personalidad jurídica y establecer normas avanzadas sobre su estructura ideológica, bajo los principios inalienables de autonomía y libre cátedra, que han sido, hasta hoy, postulados fundamentales de nuestra Alma Máter.
La XXXIV Legislatura 1937-1939 aprobó la Ley Número 92, primera en regir la marcha jurídica de la Universidad. Era a la sazón su presidente el Diputado Lic. Ricardo Valenzuela e integrantes de la misma los Diputados Francisco M. Enciso, Benjamín Landeros, José Gálvez Figueroa, Luis Margaillán Jr., Alberto R. Sáyago, Luis O. Quiroz, Jesús María Suárez Jr., y Francisco E. Ceballos. El Gobernador, C. Gral. Román Yocupicio, simpatizante y eficaz propulsor de la creación de la Universidad, promulgó la citada Ley el 22 de noviembre de 1938, quedando plasmado así el deseo unánime del pueblo sonorense.
Nombres en placas de bronce
A los nombres citados en listas anteriores, se debe agregar el de los fundadores docentes que figuran en las broncíneas placas del muro interior derecho en la entrada al edificio de Rectoría:
A los nombres citados en listas anteriores, se debe agregar el de los fundadores docentes que figuran en las broncíneas placas del muro interior derecho en la entrada al edificio de Rectoría:
Profr. Aurelio Esquivel Casas, Profr. Adalberto Sotelo, Lic. Manuel Gándara, Profr. Lauro Quiroz, Profr. José Suárez Derbés, Profra. Rosario P. de Carpio, Dr. Carlos B. Michel, Lic. Arnoldo Palacios M., Lic. José Rojas, Profr. Ernesto Salazar Girón, Lic. Alfonso Castellanos, Lic. Ricardo Valenzuela G., Profr. Aureliano Corral Delgado, Profr. Amadeo Hernández Coronado, Profr. Carlos Espinoza M., Profr. Rosalío E. Moreno, Profr. Antonio López Limón, Profr. Luis A. Peterson, Profr. Ignacio Bribiesca, Profr. José Sosa Chávez, Ing. Luis Sierra Aguilar, Profra. María C. de Peterson, Profr. Luis Martinon Pujol, Arq. Leopoldo Palafox Muñoz, Arq. Felipe N. Ortega, Dr. Vïctor Ocampo Alonso, Dr. Ignacio Cadena, Profr. Enrique García Sánchez, Ing. Luis Gómez del Campo, Dr. José Jiménez Cervantes, Dr. Carlos Tapia T., Profr. Fernando Pesqueira, Lic. Rafael de la Mora y V., Ing. Carlos Gajón Sánchez, Lic. Enrique E. Michel y Dr. Jacinto Jiménez Miranda.
Colocación de la primera piedra
El 12 de octubre de 1941, el Gral. Anselmo Macías Valenzuela, Gobernador de Estado, en la citada fecha colocó la primera piedra del edificio que posteriormente ocuparían las escuelas secundaria, preparatoria y normal. La cuchara de albañil que usó el Gobernador Macías se guarda como testimonio de aquel trascendente suceso cultural.
El 12 de octubre de 1941, el Gral. Anselmo Macías Valenzuela, Gobernador de Estado, en la citada fecha colocó la primera piedra del edificio que posteriormente ocuparían las escuelas secundaria, preparatoria y normal. La cuchara de albañil que usó el Gobernador Macías se guarda como testimonio de aquel trascendente suceso cultural.
Inicio de labores universitarias
El 15 de octubre de 1942 fue el día señalado para que “la idea luminosa venida del ancho azul del firmamento tuviera puerto en el alma de Sonora” (Leopoldo Ramos), pues en ese día se realizó la aurora cultural para el Estado. Este acontecimiento llenó de júbilo a todas las clases sociales; una ola de optimismo recorrió todos los ámbitos del solar sonorense, porque veía cumplido el anhelo de los mejores de sus hijos y cristalizadas las aspiraciones yacentes en las mentes progresistas de la entidad. Esta ola de optimismo aún no se apaga porque vibra como clarín triunfal en la marcha progresista de la Universidad bajo el mensaje de su lema, imbíbito en la mente de sus egresados que, con su saber, iluminan la mente del pueblo y vitalizan generosamente las instituciones.
El 15 de octubre de 1942 fue el día señalado para que “la idea luminosa venida del ancho azul del firmamento tuviera puerto en el alma de Sonora” (Leopoldo Ramos), pues en ese día se realizó la aurora cultural para el Estado. Este acontecimiento llenó de júbilo a todas las clases sociales; una ola de optimismo recorrió todos los ámbitos del solar sonorense, porque veía cumplido el anhelo de los mejores de sus hijos y cristalizadas las aspiraciones yacentes en las mentes progresistas de la entidad. Esta ola de optimismo aún no se apaga porque vibra como clarín triunfal en la marcha progresista de la Universidad bajo el mensaje de su lema, imbíbito en la mente de sus egresados que, con su saber, iluminan la mente del pueblo y vitalizan generosamente las instituciones.
Profr. Aureliano Esquivel Casas
Maestro de origen coahuilense, el profesor Aureliano Esquivel Casas fue llamado para poner en marcha las actividades de la Universidad en su carácter de organizador técnico de la misma, tarea que cumplió con eficacia y profesionalismo reconocidos. A él correspondió recibir la aportación inicial de la Unión Ganadera Regional de Sonora para la creación de una escuela de agricultura y ganadería.
Maestro de origen coahuilense, el profesor Aureliano Esquivel Casas fue llamado para poner en marcha las actividades de la Universidad en su carácter de organizador técnico de la misma, tarea que cumplió con eficacia y profesionalismo reconocidos. A él correspondió recibir la aportación inicial de la Unión Ganadera Regional de Sonora para la creación de una escuela de agricultura y ganadería.
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“En la historia de Sonora se avecina uno de los acontecimientos de mayor trascendencia. Los sonorenses pueden saludarlo con júbilo, sin olvidar un solo momento que el advenimiento de la Universidad significa primordialmente obligaciones y responsabilidades que cumplir. Mucho hará la Universidad de Sonora si la ayudan los hijos del Estado”. Aureliano Esquivel Casas (1942)
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Fuente: Memoria Gráfica de la Universidad de Sonora. 50 Aniversario.
Foto tomada de http://www.skyscrapercity.com/showthread.php?t=407897
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