En un mundo todavía debilitado por las secuelas de la Primera Guerra Mundial, no era difícil imaginar que la vida cotidiana de la mayoría de los individuos de todos los rumbos del planeta se desgastaba en una suerte de desamparo social en el que campeaba la ausencia de proyectos personales. En particular, la economía de las naciones que se vieron involucradas en la guerra debería iniciar de nuevo a partir de cero, y el futuro para la población se debatía entre el gris asfixiante del hedor de las trincheras y el negro constante de una realidad que no ofrecía más camino que el exilio: Una especie de barra cromática sin esperanza.
Diez años después de la conclusión de la gran guerra, las libertades civiles seguían restringidas en nombre de la seguridad nacional, pues el resultado del conflicto bélico señaló el fin de la hegemonía europea sobre los asuntos mundiales y dio paso al surgimiento de un nuevo poder soviético y a la presencia de los Estados Unidos en Europa, creando un contrapeso político y económico que estableció un vacío político que aprovecharon ambas potencias.
En ese marco, la primera mitad de 1928 se presenta como un periodo de contrastes al nivel mundial: En tanto que el Senado estadounidense acuerda desbloquear las propiedades alemanas embargadas durante la Primera Guerra Mundial, en México se organiza una gran manifestación estudiantil contra la intervención norteamericana en Nicaragua; al tiempo que al otro lado del mundo, en la URSS, se producen disturbios de campesinos para protestar contra la escasez de abastecimientos, el papa Pío XI desaprueba la celebración de competiciones deportivas femeninas en las Olimpiadas de Roma, y mientras que se reanudan las hostilidades chino-japonesas, la estadounidense Amelia Earhart se convierte en la primera mujer en sobrevolar el Atlántico.
Si bien en 1927, la Bell Telephone Company realizó una de las primeras experiencias públicas de televisión de manera inconsistente, no fue sino hasta aquel ahora lejano 1928, cuando las primeras transmisiones de la televisión nacieron a la vida en los Estados Unidos: El mes de julio, desde la estación experimental W3XK, en Washington, se comenzaron a emitir imágenes con cierta regularidad y con una definición de 48 líneas; si bien el concepto de la televisión había nacido muchos años atrás, a partir de la conjunción de una serie de fenómenos e investigaciones simultáneas pero desarrolladas aisladamente, basadas en el descubrimiento de la fototelegrafía a mediados del siglo XIX. Curiosamente, el término televisión no sería usado sino hasta 1900.
En 1929, la British Broadcast Co. (BBC) manifiesta cierto interés en las investigaciones sobre la televisión, luego de que se habían logrado transmitir imágenes desde Londres hasta Nueva York, además de demostrar también la televisión a color, la televisión exterior con luz natural y la televisión en estéreo; todo ello, desde luego, en forma muy primitiva.
Pese a que la BBC no veía en el nuevo invento alguna utilidad práctica, aseguró un servicio regular de transmisión de imágenes. Así, las transmisiones oficiales se iniciaron el 30 de septiembre de 1929, en tanto en los Estados Unidos, la CBS y NBC empezaron a transmitir en 1930. En ambos casos se utilizaron sistemas mecánicos y los programas no se emitían con un horario regular.
Las emisiones con programación se iniciaron en Inglaterra en 1936, y en Estados Unidos el día 30 de abril de 1939, coincidiendo con la inauguración de la Exposición Universal de Nueva York. Las emisiones programadas se interrumpieron durante la II Guerra Mundial, reanudándose a partir de cero al término de la conflagración, de tal forma que en 1948 sólo Estados Unidos y Gran Bretaña disfrutaban de emisiones regulares de televisión.
Oficialmente, el 31 de agosto de 1950 se inaugura la televisión comercial en nuestro país: XHTV Canal 4 arranca con una transmisión desde el Hipódromo de las Américas. Al día siguiente, el canal comienza sus transmisiones regulares con la emisión del IV Informe de Gobierno del presidente Miguel Alemán Valdés.
Hay quienes mencionan que los primeros pasos de la televisión en México, en su etapa experimental, se remontan al año de 1934, cuando Guillermo González Camarena, un joven de 17 años, estudiante de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME), quien sólo estudió dos años sin recibirse nunca de ingeniero, realiza experimentos con un sistema de televisión de circuito cerrado en un pequeño laboratorio montado en las instalaciones de la estación de radio XEFO, dándole un giro de romanticismo al nacimiento de la televisión en México.
Sin embargo, los primeros experimentos con la televisión en nuestro país se relacionan con la traída a México de un equipo de exploración mecánica. Esto ocurría entre 1928 y 1929, gracias a la iniciativa del ingeniero Francisco Javier Stavoli y al apoyo económico del Partido Nacional Revolucionario, que tenía la estación de radio XEFO, de la cual Stavoli era el encargado técnico.
La primera transmisión en blanco y negro en México, se lleva a cabo el 19 de agosto de 1946, desde el cuarto de baño de la casa número 74 de las calles de Havre en la capital del país, lugar de residencia de González Camarena. Fue tal el éxito, que el 7 de septiembre de ese año, a las 20:30 horas, se inaugura oficialmente la primera estación experimental de televisión en Latinoamérica; la XEIGC, que transmitía programas sabatinos. Las siglas se transformarían en XEHGC-Canal 5. Los programas se captaban en dos pequeños receptores que fabricó González Camarena: Uno instalado en la Liga Mexicana de Radio Experimentadores; el otro, en la XEW o en la XEQ, según resultara más conveniente.
En 1947, una comisión del presidente Miguel Alemán Valdés, encabezada por Salvador Novo y Guillermo González Camarena, debería viajar a Estados Unidos y Europa para observar y estudiar la televisión a fin de proporcionar argumentos imparciales y objetivos que permitieran definir el uso de esta tecnología en nuestro país. Novo se encargaría de los aspectos cultural, educativo y socioeconómico, mientras que González Camarena, de los “detalles técnicos.
El 11 de febrero de 1950, el Diario Oficial de la Federación publica el decreto que fijaba las normas a que se sujetarían las instalaciones y la operación de las estaciones de radiodifusoras de televisión.
El 26 de julio de 1950, XHTV Canal 4, con sus estudios y oficinas en los pisos 13 y 14 del edificio de la Lotería Nacional y el equipo de la RCA realizó transmisiones de prueba que culminaron en su inauguración oficial, el 31 de agosto con la citada emisión desde el Hipódromo de las Américas. Al día siguiente, el primero de septiembre, Canal 4 regularizó sus transmisiones con la emisión del IV Informe de Gobierno del presidente Miguel Alemán Valdés. Nacía entonces la primera televisora mexicana y de América Latina.
En ese año, la XETV-Canal 6, de Tijuana, Baja California, y la XEQ-TV Canal 9 (actualmente con las siglas XHTM Canal 10), en Altzomoni, Estado de México, también inician sus transmisiones.
La XEW-TV Canal 2, propiedad de la familia Azcárraga, es inaugurada en 1951. Ese mismo año, la XHGC Canal 5, de Guillermo González Camarena, queda integrada al cuadrante televisivo.
Para 1955, con la fusión de los canales 2, 4 y 5, se crea la empresa Telesistema Mexicano. Posteriormente, en 1959, inicia transmisiones XEIPN Canal 11, del Instituto Politécnico Nacional; y en 1968, XHTIM Canal 8, del Grupo Monterrey (hoy XEQ-TV Canal 9, integrado al consorcio Televisa), y XHDF-TV, Canal 13.
Es precisamente en 1968 cuando nuestro país incursiona en la era de las comunicaciones vía satélite al transmitir a todo el mundo los diversos eventos de la XIX Olimpiada México 68.
XHUS-TV Canal 8 Universitario
Con el propósito de difundir permanentemente las funciones de docencia, investigación y extensión universitaria surgió en la frecuencia de XHUS-TV canal 8, la Televisión de la Universidad de Sonora (Unison) 23 años después de ser fundada el alma mater.
En 1964 la Dirección General de Telecomunicaciones originalmente otorga la frecuencia 17 en Ultra Alta Frecuencia (UHF) a solicitud de la Universidad de Sonora para operar un canal cultural; sin embargo, los televisores caseros de aquel entonces no contemplaban esa banda. Por tal motivo, el radioaficionado sonorense Remigio Agraz Güereña cedió la frecuencia de canal 8 que le había sido otorgada y que hasta la fecha usa esta estación televisora.
El 4 de diciembre de 1965 XHUS-TV Canal 8 inicia operaciones, teniendo como sede dos salones del extremo izquierdo de la planta alta del edificio principal de la Universidad. Su horario de operaciones era tan solo de dos horas, de 20:00 a 22:00 horas, de lunes a viernes, debido a que el equipo de audio, estudio y cabinas eran las mismas donde operaba XEUS, Radio Universidad.
Al poco tiempo cambia su ubicación a las instalaciones ubicadas en la parte inferior del ala norte del Edificio del Museo y Biblioteca, donde fueron inauguradas por el gobernador Luis Encinas Johnson y el rector Moisés Canale, fungiendo como primer director Manuel R. Canale.
En la placa alusiva se lee: “Radio Universidad de Sonora establece sus instalaciones de televisión dedicándolas a estrechar relaciones entre los sonorenses y su más alta casa de estudios y a promover en los jóvenes la adquisición de nuevas aptitudes en las ciencias y en las artes. Hermosillo Sonora, Diciembre de 1965.”
El canal 8 de la Universidad de Sonora tiene como objetivo contribuir al desarrollo del proceso enseñanza aprendizaje y difundir en el seno de la sociedad civil, el cúmulo de logros, experiencias y valores generados en la vida de la institución a fin de contribuir a la solución de los problemas que confronta la región y el país.
XHUS-TV ha operado siempre bajo el régimen legal de permisionaria, establecida en la Ley Federal de Radio y Televisión, esto significa que por su carácter cultural sólo tiene facultad para transmitir programas educativos a favor de la sociedad, por lo que no puede ser vehículo de ideologías políticas o con fines de lucro, de tal manera que la programación de Televisión Universitaria está dirigida a estudiantes, docentes y público en general.
El primer transmisor de televisión del canal fue diseñado en San Diego, California, por la empresa DWM, y ensamblado en Hermosillo por el Ingeniero Manuel R. Canale. La antena se montó sobre la torre de radio diseñada por el Ing. Víctor Martínez y alumnos de la Escuela de Ingeniería de la Unison.
Es en 1973 que por problemas de tipo económico para su mantenimiento y costos de producción la estación es cerrada y permanece fuera del aire.
En 1977 se inician los trámites para restablecer la señal, y un año más tarde se modifica el viejo transmisor DWM para que su señal de blanco y negro sea a color, se adquiere equipo de video tape; sin embargo, el transmisor pierde potencia en la conversión, dado que su vida útil ya había caducado.
En junio de 1979, después de un largo período de inactividad, XHUS-TV reinició sus operaciones gracias a un convenio oficial con el Instituto Politécnico Nacional y XHIPN Canal Once, en el que vía microondas se captaba su señal y se retransmitía, aunque también existía una programación local conformada por programas de TV Unam.
1981 fue un año de gran importancia, ya que el 12 de octubre se inaugura la antena receptora de satélite para captar la señal del INTELSAT-6, en la que operaba el Canal Once.
Se adquiere en 1984 un banco de edición de video tape que simultáneamente se opera como master de transmisión, lo que permitió coproducir algunos programas con CONACYT, SEP y Anuies.
En 1992 se adquieren dos cámaras DSP para estudio, una computadora Amiga 2000 y un banco de edición, lo que mantiene al aire la revista informativa “Desde la Universidad”, realizada a partir de 1989, y transmitida por XEWH Telemax.
Es digno de mencionar que pese a que XHUS-TV es una de las estaciones televisoras universitarias de la república mexicana, además de estar adscrita a la Red de Televisión y Video Universitario de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies), en 2002 la televisora suspendió sus actividades por problemas financieros y falta de equipamiento.
En junio de 2010 reinició transmisiones de manera provisional desde las instalaciones de lo que fuera el programa Educadis, en el Centro de las Artes.
Actualmente, el canal trasmite 12 horas una programación que se conforma con producción propia, del Canal 22 del IPN, de TVUnam y del Cine Club Unison.
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• Síntesis del documento “Canal 8 Universitario: Una asignatura pendiente”, compilado por Francisco Ruiz, Víctor de la Torre, Miguel Ángel Franco y Armando Zamora.
• Memoria Gráfica de la Universidad de Sonora. 50 Aniversario.
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