Trova y algo más...

jueves, 27 de agosto de 2009

Eureka, la entropía y el momentum...

Acabo de leer que la segunda ley de la termodinámica, la Ley de la Entropía, plantea que la materia y la energía sólo pueden cambiar en un sentido; esto es, de utilizable a inutilizable, de disponible a no disponible, de ordenado a desordenado... y aún con eso, los seres vivos parece que son capaces de moverse en dirección contraria al proceso entrópico...

Pues Eureka! (o εύρηκα!, como gritara Arquímedes, corriendo bichi por las calles de Siracusa, cuando hizo aquel tiradero en la bañera): al fin descubrí —aunque propiamente vestido, debo aclarar— el motivo, causa u razón del porqué hoy me siento más entrópico que nunca: voy de lo útil a lo inútil con una rapidez que hubiera envidiado hace 35 años en el terregal aquel de la EPURS donde el maestro y licenciado Francisco Miranda nos ponía a correr para desponzoñar la hormona jubilosa que ya se asomaba por la entrepierna de la adolescencia...

No creo que sea por la edad ni por el día ni por mi apariencia ni por el momentum ni porque he llegado tarde a casi todo en la vida... simplemente me siento entrópico y ya (¡Oh, desolación... oh, tristeza..., diría el Dr. Zachary Smith de la serie "Perdidos en el espacio")...

(Tal vez con unas cervezas pueda darle reversa al proceso de mi particular, íntima, interna entropía: hoy, que es día de San Armando, se aceptan invitaciones lo cual no quiere decir que necesariamente se responderán con un prosaico ¡Órale, ca'ón!).

¡Salú!

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